dimecres, 10 d’octubre del 2012

Catalunya al revés
Me cuentan que en su reciente visita a Barcelona para hablar de su libro -la primera parte de unas jugosas memorias políticas- José Bono se extrañó de que, habiendo pasado la Diada, muchas esteladas y cuatribarradas siguieran colgadas en los balcones. Compungido, el político manchego se alegró algo al identificar una rojigualda solitaria. ¿Por aquí también pasó la manifestación?, preguntó a su interlocutor, quien le informó de que la mani había transitado por unas calles más allá.
Pobre home, ell que ens havia fet callar al Congreso Español per parlar en català, i mira com s'ha de veure ara, passejant per Barcelona i veient mil estelades.